Que si hace falta cemento, silicón, pintura, block, chapas, tarjas....que me visita un supervisor "on a high horse", un contratista muy señorita o un albañil turbado/ofendido/necesitado/high. Y me drena.
Todas la mañanas con un café y un cigarro no tengo más ganas que volver a presionar teclas hasta formar palabras que me gusten y se recompongan en un collarcillo hippie de ideas ensartadas. Así que hoy cierro mi oficina.
De donde vengo no existe la necesidad de estar consciente. Las imágenes se pintan aparentemente por si solas y por eso me mueven más. Los mares no son azules ni claros ni oscuros, son rojos, amarillos, de mercurio y mercuriales. La luna sí me responde y el monólogo se distorsiona hasta el punto en el que el teatro desaparece y no queda más que un balcón bañado en plenilunio; donde me planto yo hablando distraído. Observando allí abajo filas danzantes de mujeres albinas de ojos fuego. Y las filas se mecen en olas y las olas rompen en sonidos profundos y sordos, de pequeñas implosiones de agua comiendo agua. Un cuervo pasa frente la boca-blanca-luna y kraaa! me corre de la pintura... me des...pie....rto.